¿POR QUÉ?
¿Por qué sufro
al recordar tu rostro?
cuando tu nítido recuerdo
me invade la razón
e impide que te diga adiós.
Porque sé yo
que está mal pensar en ti,
cuando sé ya
que hay alguien más
aparte de mi.
Porque es tonto imaginar
que tu amor me vas a dar,
pues la fantasía volverá,
la mentira crecerá
y mi corazón sufrirá.
¿Por qué recordar?
cuando lo mejor…
sería olvidar y dejar atrás
la imagen de ferviente caballero
que me vino a enamorar.
Porque es imposible
tenerte a mi lado
y porque es ostensible
que ya no estás enamorado
de este corazón acelerado.
¿Por qué te espero?
si bien sé que no volverás,
que ahora tienes otro anhelo
que lejos de mi está
y al que jamás podré llegar.
Porque con ansia espero
tu impetuoso regreso,
que ha de traer consigo
todos los escombros
de un amor tardío.
Porque te darás cuanta
de que yo era lo que tú querías
y aún así, me dejaste de lado,
decidiste seguir una fantasía
que al final te engañaría.
¿Por qué habría
de perdonar tu abandono?
si cuando partiste
yo padecía
y agonizaba de dolor.
Porque te cegaba
la ilusión de un nuevo amor
y eso atrajo a tu corazón,
pues con fe lo seguiste
sin darme alguna explicación.
¿Por qué escribo esto?
si bien sé que no lo leerás,
que no te importará,
que no te estremecerá
y que ni siquiera me has de recordar.
Porque ya olvidaste
que te amo sin razón,
puesto que para amar
se precisa de personas
y no de vagos argumentos.